Otra ciudad

Casi medianoche,
Inicio el viaje,
Cruzaré el ancho río,
Casi en la soledad del hastío,
Pensando en otros públicos,
En otra gente,
Igual pero distinta,
Pisar otro escenario me atemoriza,
Jugar de visitante me da escozor,
Pero la adrenalina a mil,
Me mantiene alerta,
Arriba el telón,
Llegó la hora de volar!!!

Gracias

Por estar,

Por oirme,

Por llorar,

Por sentir,

Por acariciarme,

Por la risa,

Por amarme,

Intensamente,

Por dedicarte,

Fervientemente,

Por cristalizarte,

Por la lluvia,

La tormenta,

Por las noches,

Y los días,

Por las nubes,

Y los vientos,

Por dejarme,

.....................

En libertad...............

Círculo vicioso

Nacer,

Vivir,

Amar,

Morir,

Volver a nacer,

Volver a sufrir...

Volver a soñar

Cada vez que empiezo un proyecto nuevo, comienzo a volar y soñar despierto. El problema es que mis sueños me ocupan las treinta horas del día, compulsivamente, si dejarme descansar un simple segundo. Ojalá obtenga lo que estuvimos cerca de alcanzar en la última obra. La "iluminación" tan buscada, quizás, no la alcancemos nunca, tal vez es una quimera, pero estuvimos muy cerca, porque todavía guardo la emoción de cada función y las lágrimas que se me fugaban en la escena principal. Lágrimas de satisfacción, lágrimas de admiración y sentimientos.

Cada vez que empiezo un nuevo proyecto creo que llegaré hasta las puertas, ojalá esta vez logre abrirlas y entrar en el nuevo mundo.

Idea

Abrir los ojos,

Sentir la luz absorber los poros,

El roce de tu cuerpo lacerar mis heridas,

Bañarme en tu perfume de piel morena,

Inundarme en el aura de sexo fresco,

Girar, volver, reir,

Y volver a girar.

¡Qué hermosa forma de comenzar el día!

¡Qué bella idea continuar con vida!

Golpeó a mi puerta

El ángel golpeó a mi puerta,

Discretamente,

Respetando mi silencio interior,

Podría haber entrado sin pedir permiso,

Pero no,

Quizás por pudor,

Quizás por educación, (tendrán una educación especial los ángeles?)

Quizás sólo porque sí,

Pero se anunció.

Le abrí mi casa, (no se me ocurrió pensar que podría no haberlo atendido)

Y le entregué mi cuerpo.

Pero no,

No era mi cuerpo lo que buscaba,

Era mi alma. (qué tonto llevarse algo vacío y sin valor!)

Nunca más volvió,

A veces,

Cuando hace mucho frío,

Siento necesidad de ella.

¡Cómo si no la pudiera reemplazar con una gruesa manta!

Pero no...

Vivir tu cuerpo

Quisiera vivir tu vida,

Poseer tu cuerpo,

Tus sensaciones,

Volar con tus orgasmos,

Hundirme en tus depresiones,

Recorrer cientos de cuerpos,

Con tu cuerpo de gacela almibarada,

Y al terminar la faena,

Abrirte con un puñal de flores,

Para asomar al mundo,

En un nuevo día,

Esperando recomenzar la historia.

Multipersonal

A veces, soy otro,

El que escribe,

El que sueña,

El de las pesadillas diurnas,

El de los romances nocturnos,

El de las sombras y las luces,

El autista por propia decisión,

El pensador ausente de todo pensamiento,

El mentalista demente,

El creador de mis propios sueños,

El destructor de mi realidad.

Soy tantas personas,

Que apenas puedo reconocerme,

Para eso he tatuado mi nombre real,

Y todos los días al despertarme,

Parado frente al espejo,

Leo mi nombre grabado en mi frente.

Caída libre

Buscando respuestas,

Me asomé a tu ventana,

Extendí mis brazos,

Tan sólo dos pasos,

Y caí al abismo.

Con los ojos bien abiertos y la mente en blanco

Mirar sin ver,

Sufrir sin sentir,

Reír con lágrimas,

Con la vista al frente,

Y los ojos en la espalda.

Búsqueda

Qué busco del teatro? : Busco las raíces, las contradicciones, la revelación y al final del camino “la iluminación”.

En el abismo

A pesar de estar inconciente, sentía miles de pequeñas peludas patas que recorrían mi cuerpo por todos lados. Me generaba esa desesperación que uno suele tener cuando está en medio de una pesadilla y quiere despertar pero no puede. El problema es que aquí no se trataba de una pesadilla, sino la más pura realidad. No recuerdo cuanto tiempo pasó, para mi fue una eternidad, sólo evoco la sensación de frío húmedo que comenzó a invadirme y percibir el golpe furioso de agua helada contra mi cuerpo. El shock hizo que abriera los ojos, sólo podía ver una lluvia de agua que con violencia revolcaba mi cuerpo de un lado hacia otro provocando que los cientos de insectos que se habían apoderado de mi cuerpo salieran despedidos en todas direcciones, algunos como efecto del agua y otros escapaban por propia voluntad ante el ataque acuoso (¿las arañas tienen voluntad?). No podía ver quien estaba efectuando la maniobra salvadora, pero le estaba súmamente agradecido. No tuve oportunidad de expresarlo porque inmediatamente volví a desmayarme, pero ahora era distinto, una sensación de paz me invadía y empecé a soñar con situaciones agradables. Primero, creo recordar, vislumbré un lago muy azul, en medio de enormes montañas de cumbres nevadas, luego, una inmensa playa dorada, acariciada por pequeñas olas, y traviesos remolinos de arena que se levantaban aquí y allá, por último, una enorme catarata de agua verde esmeralda que caía indefinidamente sin que pudiera ver el final de la cascada. Después, nada, la mas impenetrable ausencia de todo, invadió mi mente, y una suave melodía, que no puedo ubicar pero que reconocía haber escuchado alguna vez, empezó a inundar mis pensamientos.

Cuatro pares de patas

A pesar del miedo, vencido por el sueño, caí profundamente dormido. Una sensación de paz interior me embriagaba y si bien no recordaba lo que estaba soñando una profunda sonrisa iluminaba mi rostro. Sentía cientos de caricias que se extendían a lo largo de mi cuerpo y este respondía con imperceptibles movimientos de mis terminaciones sensoriales nerviosas. Mis sueños eran completamente oscuros, no percibía nigún tipo de figura o forma pero eran sumamente placenteros. De golpe, un ruido seco y profundo me desperto sobresaltado, y lo que ví me produjo una sensación de náusea que me provocó un desvanecimiento inmediato, cientos, miles de pequeñas arañas cubrían todo mi cuerpo y se desplazaban de un lado a otro a una velocidad increíble.

Escombros

Al despertar todo era oscuridad y silencio. Apenas podía respirar, la bolsa de arpillera que cubría mi cabeza me asfixiaba, pero no tenía fuerzas ni para gritar. Mi cabeza, era un dolor permanente y sentía incómodamente la sangre coagulada que caía por mi nuca y mi frente, y me provocaba una horrible sensación, como si hubieran derramado pegamento sobre mí. Tenía que pensar, recuperar la noción del tiempo y el espacio y tratar de recordar cómo había llegado a ese lugar desconocido (parecía un granero o mejor un establo, por el olor a bosta que se filtraba por la bolsa junto con el poco aire que entraba). Recordar, tenía que recordar...la calle Corrientes, el bajo, casi 25 de Mayo, el marinero que se acerca pidiendo fuego,...busco en mi bolsillo el encendedor...y no más...sólo un golpe atroz que me derrumba y me deja inconciente. ¿ Por qué a mi?. Rescate no van a pagar por esto, dinero no tengo, ni tarjetas, estoy quebrado y a fin de mes sólo me quedan unas pocas monedas para viajar...Muchas preguntas y nadie para responderlas...Y mi cuerpo dolorido, tendido sobre el frío suelo como un montón de escombros, de carne y hueso,... y mucho miedo...

Fue

Cuando me di cuenta,
Ya lo había perdido...

Loco

Definitivamente,
Sin lugar a dudas,
Indudablemente,
Estoy,
Completamente,
Loco................

¿Tomamos un café?

A veces sólo necesito sentarme frente a tí,
Sumergirme en el abismo de tus ojos,
Y saboreando un delicioso café,
Bajo la noche del boulevard,
Soñar en todo lo que podría ser...

Anatomistas necios

Quién quiera hacerme creer que el corazón es un músculo hueco por el cual pasa la sangre y es bombeada al resto del cuerpo es un necio. No creo en aquellos que definen las cosas como las ven, creo en aquellos que relatan los cuerpos como los sienten, los perciben, los huelen. Músculo estriado? No me hagáis reir, agrietado por las desventuras amorosas, los fracasos emocionales y fuerte como un roble por las alegrías de quienes son objeto de nuestra pasión. No saben acaso que la sangre a sus puertas se convierte en palabras? Flaubert, Neruda, Borges y tantos otros alimentan los ventrículos y las aurículas con sus frases. Anatomistas necios que sólo ven lo que el microscopio les muestra, ciegos y sordos, cerrad los ojos y mirad con los otros sentidos...escuchad los tambores que resuenan al paso de las palabras, cómo pueden ser tan ignorantes...

El Marqués retorna

El próximo 30 de noviembre "El marqués de Sade" cruza el charco invitado a cerrar un festival de unipersonales en Montevideo. Creí que este año había terminado teatralmente hablando, fue muy exigente y agotador. El domingo pasado terminé con las dos obras que estaban en cartel "La red inextricable" y "Clitemnestra o la absurda tragedia de una griega" y estoy viendo que hacer para el próximo año. Estoy cansado pero al mismo tiempo con el sindrome de abstinencia que se me crea cada vez que cierro el ciclo anual de teatro. Debo reconocer que es bueno volver a tener domingos familiares, estar con los míos mas tranquilo, no a las corridas porque a la noche hay función, pero el sindrome pega fuerte. Ahora me pondré a trabajar con el marqués, porque es todo un desafío llevarlo a un festival frente una audiencia exigente. Bueno, me tomé una licencia en mi blog para hablar de mi quehacer teatral. Ya volveré con mis palabras.

Quisiera regalarte una galaxia

Quisiera regalarte una galaxia,
Una pequeña,
Brillante,
Llena de planetas y asteroides.
Y con un cometa de larga cola,
Recorrerla siempre juntos,
Descubrir nuevos mundos
Y crear nueva vida.
Quisiera regalarte una galaxia,
Le pondría tu nombre,
Para que él, sea famoso en todo el universo,
Y cuando te mencionen,
todo sea centelleo y fulgor.
Quisiera regalarte una galaxia,
Una pequeña,
Para que puedas colocarla alrededor de tu cuello,
Y acariciarla cuando te encuentres triste.

Zeus

Zeus fue el primero,
Apareció tirado en un baldío,
Era uno de varios y cuando la vió,
Se le acercó a ella como pidiéndole refugio.
Han pasado ¿16? años.
Zeus creció y tomó una figura imponente,
Su largo pelaje, su porte, lo hizo enseguida el rey de la casa.
Sus travesuras y escapadas nos preocupaban,
Pero siempre volvía,
Sucio, oloroso y con rastros de alguna batalla.
Dalila apareció un par de años después.
Provenía de una familia de alcurnia.
Traviesa como ninguna,
Enseguida fué compinche de Zeus,
Y cuando cumplió seis meses se convirtió en su amante.
¿Ella?, ella ya no estaba,
Pero la vida siguió su curso.
Zeus y Dalila tuvieron cuatro hijas,
Cleopatra, Samantha, Isis y Osiris.
Nacieron vagabundas como el padre,
Rechazando la cuna aristocrática de la madre.
A ellos se sumó Santino (empezó a haber ladridos en mi hogar) y mi nuevo amor,
El de hace trece años,
Con el que dimos origen a Pablo y Ailín,
Y el que me sigue acompañando cada despertar.
Zeus nos dejó hace unos cinco años,
Santino hace un par,
Pero el resto siguen adelante,
Y todos los días y las noches
Recorren nuestra casa alborotando
Todos los rincones y saltando sobre nuestros cuerpos.
Pero Zeus, fue el primero,
Fue el rey de la casa,
Y desde entonces,
El trono quedó vacante...

No desearás la mujer del prójimo...

¿Y la mujer del prójimo puede desearme?
¿Y si deseo al prójimo? o el prójimo me desea a mí?
¿Y si el prójimo no desea a su mujer?
¿Y si la mujer del prójimo no desea a éste?
¿Y si nos deseamos los tres?
¿Y si ninguno desea a ninguno?
¿Y si mi mujer desea a la mujer del prójimo?
¿Y por qué no al prójimo?
¿Y por qué no el prójimo a mi mujer?
¿Y si yo deseo a las dos mujeres?
¿Y si las dos mujeres me desean?
¿Y si todos nos deseamos?
Bah.. mejor: "No desearás" y listo...

Sediento

Deseo beberme los mares y los océanos,
Los frescos ríos que nacen en las cumbres nevadas,
Y aquellos que hierven en el verano amazónico.
Deseo beberme tus lágrimas y tu sudor,
Mil cuerpos licuados en jarabe de menta,
Y mi cuerpo batido en chocolate caliente,
O lo que es mas tentador,
Tu cuerpo caliente batido en chocolate,
Tengo sed, ...demasiada.

Consejo de amiga

Hoy sólo me permito reir,
Ya desde temprano al ver mi arrugada cara en el espejo,
Sonreí al contemplar mi ridículo aspecto.
Cuando se trabó la máquina tragamonedas del colectivo estallé en carcajadas,
Contagioso, pues el resto del pasaje empezó a reirse, primero nerviosamente,
Luego sin tapujos ni cuidados.
El colectivo se bamboleaba por la tormenta de risas en su interior.
Cundo mi jefe me devolvió el trabajo que había hecho por vigésima vez,
Exploté de risa, contagiando toda la oficina,
Lo cual me valió un día de suspensión,
Hecho que generó más risa, pués aproveché el día para estar con mi familia,
Y jugando todos a dígalo con mímica,
Nuestros gritos de algarabía inundaban todos los pasillos del edificio.
Por la calle la gente me miraba absorta,
Pues mi sonrisa era tan amplia que no permitía ver el resto de la cara.
Me sentía el guasón en medio de ciudad gótica.
Al final del día, terminé embriagado en risas,
Y por primera vez en mucho tiempo,
Pude dormir sin ayuda y acunado por millones de sonrisas,
Y mis pesadillas se trastocaron en enormes risas que poblaron mis sueños,
Y me hacían cosquillas.

Hoy viajo...

Hoy he decidido viajar,
Lejos, bien lejos,
Visitar nuevos lugares,
Beberme sus paisajes,
Saborear nuevos aromas,
Entonar extrañas canciones,
Con lenguas extrañas,
Melodías suaves por momentos,
Furiosas por otros.
Ya preparé mi escaso equipaje,
Un cepillo de dientes,
Un tenedor de madera (para evitar problemas en las aduanas),
Y dos pares de medias.
No llevaré mucha ropa,
Pues he elegido un lugar tropical.
Hoy inicio mi viaje hacia una nueva vida,
No me falta nada para la partida,
Una última mirada a mi alrededor,
No permito que una lágrima me desborde y...
Ya estoy listo,
Haciá allá voy,
Espérenme con algo fresco,
La travesía será larga.

Giros

Giro sin parar,
En las horas pares hacia la izquierda,
Durante las impares hacia la derecha.
No puedo detenerme,
Mi cabeza da vueltas y vueltas,
Por momentos parece ir delante del resto del cuerpo,
Otras permanece detrás,
Pero nunca puedo hacer que vayan al mismo tiempo.
La noche fue insoportable pues me caía de la cama a cada momento,
Por lo que decidí dormir en el piso,
Pero a cada rato rebotaba contra los muebles
Y terminaba golpeando furiosamente contra la pared.
No se como va a terminar esto,
Pero quiero dejar de ser, defintivamente,
Un trompo entre tus manos.